Juega con la luz y la conexión con el mar representado a través de los diferentes destellos de color que se observan en las franjas de la camiseta. La iniciativa de fundar la asociación IFK parte de dos estudiantes de la capital, Estocolmo, que convocaron a través del periódico capitalino Kamratern (El Amigo, o El Camarada) a los jóvenes que desearan unirse a un proyecto social para el fomento de las actividades deportivas, camisetas barça y del nombre del citado diario de Estocolmo se derivó el de la institución.